No sé porque extraña razón, este invierno me está alejando de compartir emociones, sentimientos, realidades vividas, sueños, sensaciones diarias e incluso pretéritas… Me estoy encerrando y replegando en mi misma cómo los árboles desnudos afrontan las inclemencias de este frío invierno. Mis sentimientos, dormitan y deciden ivernar acoplados a los días grises esperando el renacer de una primavera que sueño con nostalgia….
La escasa luz solar me invita a que mis ideas no se reflejen, ni fluyan con destreza por esta cuartilla cómo yo quisiera… Mi mente se siente perezosa y ajena a lo que quiero transmitir…Y, mis escasas frases, frías y lánguidas, reflejan mi estado de ánimo en esta tarde gris y lluviosa de domingo y aún,a primeros de febrero.
Echo de menos, pasear por el campo que me vió crecer y, confundir mis viejos recuerdos con el paisaje gris plomizo de los árboles desnudos y, caminar lentamente respirando el olor a mar embravecida erosionando las rocas con la fuerza de sus partículas….Y ver, ponerse la luz solar en el horizonte donde el mar y el cielo se confunden mirando a Poniente.
Necesito, encontrarme de nuevo con ese hálito de luz que me haga despertar del letargo invernal que me acosa y me sumerge en mi mundo particular haciéndome, individualista y poco comunicativa… Necesito alimentarme del intenso color jovial que me brinda la primavera para contagiarme de nuevas e intensas vivencias… Necesito renacer de nuevo de este sueño y vibrar alejando de mí, este estado de ánimo plúmbeo y monocolor.
La escasa luz solar me invita a que mis ideas no se reflejen, ni fluyan con destreza por esta cuartilla cómo yo quisiera… Mi mente se siente perezosa y ajena a lo que quiero transmitir…Y, mis escasas frases, frías y lánguidas, reflejan mi estado de ánimo en esta tarde gris y lluviosa de domingo y aún,a primeros de febrero.
Echo de menos, pasear por el campo que me vió crecer y, confundir mis viejos recuerdos con el paisaje gris plomizo de los árboles desnudos y, caminar lentamente respirando el olor a mar embravecida erosionando las rocas con la fuerza de sus partículas….Y ver, ponerse la luz solar en el horizonte donde el mar y el cielo se confunden mirando a Poniente.
Necesito, encontrarme de nuevo con ese hálito de luz que me haga despertar del letargo invernal que me acosa y me sumerge en mi mundo particular haciéndome, individualista y poco comunicativa… Necesito alimentarme del intenso color jovial que me brinda la primavera para contagiarme de nuevas e intensas vivencias… Necesito renacer de nuevo de este sueño y vibrar alejando de mí, este estado de ánimo plúmbeo y monocolor.
